En cierto sentido, el ciclismo de montaña es como cualquier otro pasatiempo o deporte que implica una herramienta necesaria como intermediario entre el entusiasta y la actividad realizada. Esta herramienta se perfecciona constante e incesantemente por una estructura densa de ingenieros, atletas, compradores y consumidores cotidianos. Puede parecer un proceso lento de perfeccionamiento de componentes con tan solo pequeños y ligeros cambios geométricos, o inserciones de neumáticos y más ángulos verticales del tubo del sillín. Pero de vez en cuando hay descubrimientos que nos obligan a reevaluar completamente las cosas, a reconsiderar cómo conducimos una bicicleta de montaña. La siguiente historia relativamente reciente nos recuerda a los frenos de disco, o al aumento de las dimensiones de las ruedas o a la introducción de las tijas telescópicas, hechos que representan momentos de cambio en el deporte.
No hace...
Continue reading...